miércoles, 9 de septiembre de 2015

La reportera que golpeó a refugiados se enfrenta a cinco años de cárcel

La periodista se ha convertido para muchos en la personificación del maltrato de Europa



VÍDEO: REUTERS LIVE

Petra László, la reportera que zancadilleó y golpeó a algunos refugiados mientras huían de la policía en Röszke, cerca de la frontera con Serbia, no solo ha sido despedida. Se ha convertido en diana de las críticas en las redes sociales y será denunciada por los partidos de la oposición de su país. Se puede enfrentar a hasta cinco años de prisión por incitación a la violencia, el máximo castigo por este delito. Por el momento ha decidido desaparecer, cuentan enNemzeti 1 (N1tv), la televisión para que trabajaba hasta el martes cuando, para muchos, László comenzó a personificar el maltrato de Europa contra los refugiados.
Varios partidos de la oposición en Hungría, como Együtt y la Coalición Democrática, han anunciado este miércoles su intención de denunciar a la operadora, según The Guardian. Le atribuyen un delito de incitación a la violencia, tras zancadillear y golpear a algunos refugiadosmientras filmaba. Tras hacerse públicas las grabaciones, el ataque le costó a László el despido fulminante. Llevaba trabajando en la cadena tres meses y medio.
La empresa rescindió su contrato con un comunicado escueto, pasando casi de puntillas, sin dar el nombre de la trabajadora y sin pedir perdón por su comportamiento, el cual se consideró "inaceptable". En declaraciones a EL PAÍS, el director de la cadena húngara, Szabolcs Kisberk, de 38 años, ha asegurado que el comportamiento de László "no se corresponde con los valores que representa la cadena, tanto a nivel humano, como profesional. Es inadmisible".
Breve comunicado con el que el canal de televisión despide a László.
El máximo responsable de N1tv indica que su cadena tiene una línea editorial "cristiana y conservadora", pero que se basa en "valores de respeto" hacia los demás. Kisberk destaca que la cadena (para la que trabajan 15 profesionales) es independiente y, aunque emite de forma gratuita por internet, se financia a través de una fundación, que es su propietaria.

Rechaza tajantemente que el canal tenga una vinculación con elMovimiento por una Hungría Mejor (Jobbik), un partido de ideología ultraderechista con el que le suelen asociar los medios locales e internacionales, como The Guardian. Fundado en 2003, Jobbik es un partido nacionalista de extrema derecha (ellos prefieren el término derecha radical), acusado de antisemita. Forma parte de la oposición al Gobierno magiar y cuenta con una organización paramilitar denominada Guardia húngara, que usa vestimenta y simbología filofascista.
N1tv suele destacar algunos de esos postulados en sus noticias. En los titulares usa expresiones como "migrantes que pululan por todos los sitios" o "Guantánamo = Hungría". También recoge opiniones contra la emigración de personas a las que pregunta en la calle bajo el epígrafe de Asalto. La cadena publicó el 3 de septiembre un discurso de Zsiga-Kárpát Dániel (Budapest, 1979), diputado húngaro y desde 2014 vicepresidente del Jobbik, en el que afirmaba:  "Hungría para los húngaros. Nos comprometemos a preservar el país exclusivamente para ellos". 

http://internacional.elpais.com/internacional/2015/09/09

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