Chile: visita a la Catedral de Mármol

Las Cuevas de mármol se tratan de una formación geológica con una belleza única en el mundo. Se formaron en mármol completamente y junto a las aguas azules del Lago General Carrera forman un espectáculo maravilloso, digno para conocer al menos una vez en la vida. Así que hoy hablaremos de turismo en Chile y nos iremos de visita a la Catedral de Mármol.

Aguas azules y monolitos de mármol

Estas serían las dos características principales de Las Catedrales de Mármol, cuya alimentación acuática surge de los ríos que se forman del deshielo de los glaciares en los Andes Patagónicos. El hielo tiene muchas partículas pequeñas que al derretirse quedan flotando en el agua, dando un efecto inusual: ligeramente turbio y con un reflejo azul por la luz del sol.

Las catedrales o cavernas de Mármol se localizan cerca de una ciudad pequeña llamada Puerto Tranquilo, con acantilados expuestos a unos 5 Km de este poblado, en dirección sureste. No hay que perderse el archipiélago de mármol (islas compuestas completamente por este material), algunos kilómetros al Noreste de la Península.

Cada bloque de mármol pesa alrededor de 5 millones de toneladas y es de un color gris claro, con algunas marcas más oscuras. Cabe destacar que se han formado durante la era Pleistoceno y que el Lago General Carrera cambia su nivel de agua todos los veranos, desde hace más de 6 mil años.

¿Qué admirar en las catedrales de Mármol?

Las estructuras más grandes e imponentes que se pueden diferenciar en este lugar son la Catedral de Mármol y la Capilla de Mármol. La primera es una isla pequeña dentro de la península y la segunda es otra isla cerca de la costa Norte. Se puede acceder a ellas en un paseo en barco, pasando por varios túneles y laberintos.

Si bien son poco conocidas por los turistas del mundo, muchos llegan a este lugar y quedan realmente impresionados. Según el momento del año en el que se viaje hasta esta zona, se pueden ver las cuevas de diversos colores. En la primavera, el agua es baja y el tono es blanco, más natural. Durante el verano, cuando el lago sube, las cuevas se inundan parcialmente y se tornan azules misteriosas

Sin dudas, es un espectáculo que vale la pena visitar. Tener en cuenta que durante el invierno las condiciones climáticas no permiten navegar por la región, por lo que las excursiones en barco se realizan de octubre a marzo, aproximadamente.

Fuente: http://nuestrorumbo.imujer.com