sábado, 19 de octubre de 2013

Mi abuelo nazi me habría matado

Redacción
BBC Mundo


Para Jennifer Teege, descubrir que su abuelo era un comandante de un campo de concentración nazi fue impactante.
Su familia nunca se lo había dicho y cuando era niña no conoció a su padre, un estudiante nigeriano en Alemania con quien su madre tuvo un breve romance.

Hace cinco años estaba en una biblioteca de Hamburgo, en el norte de Alemania, y me encontré con un libro. Estaba envuelto en un forro rojo y por algún motivo me llamó la atención y me sentí atraída por él.
El título era "Tengo que querer a mi padre, ¿verdad?" y la portada estaba ilustrada con una pequeña foto de una mujer que me resultaba ligeramente familiar.
Así que tome el libro y me sumergí rápidamente en él. Había muchas fotos y, según iba avanzando en las páginas del libro, sentía que algo no iba bien.
Al final, el autor resumía algunos detalles de la mujer de la foto de portada y su familia y me di cuenta de que coincidía exactamente con lo que sabía de mi propia familia biológica.

Cuando Teege vio en un libro la imagen de su madre biológica le resultó familiar.
Ahí fue cuando entendí que era el libro de la historia de mi familia.
La mujer de la foto era mi madre y su padre era Amon Goeth, el comandante del campo de concentración de Plaszow, en Cracovia, Polonia.
Mi madre nunca me dijo nada pero yo no crecí con ella; me dio en adopción cuando era pequeña.
Unas semanas después de mi nacimiento me mandaron a un hospicio donde a veces me iba a visitar. Después crecí con una familia que me adoptó cuando tenía siete años.
Desde entonces dejé de tener contacto con mi madre a la que sólo vi una vez más.
Fue cuando era una veinteañera y probablemente no me dijo nada entonces porque quería protegerme.
Pensó que sería mejor que no supiera nada de mi pasado, de la verdad, de mi familia y de mi abuelo.
Descubrirlo fue todo un choque emocional; era como si el mundo se caía a mis pies.
No podía hacer nada. Fui a casa, me llevé el libro y lo volví a leer. Había detalles sobre mi madre, mi abuela y mi abuelo, Amon Goeth.
Y así, lentamente comencé a entender el impacto de lo que acababa de leer.

Dónde poner el pasado


Al crecer como una niña adoptada, no sabía nada de mi pasado o muy, muy poco. Así que después, enfrentarme a ese tipo de información fue sobrecogedor.
Pasaron semanas, un mes, hasta que empecé a recuperarme realmente.
Había visto la película "La lista de Schindler" en la que Ralph Fiennes representaba a mi abuelo. Sabía que interpretaba el papel de un hombre que se llamaba Goeth pero no había hecho la conexión; nunca había pensado que podía estar relacionado
Cuando me enteré, tenía 38 años. Creo que si hubiera sabido todo esto cuando era más joven, hubiera sido más fácil porque habría tenido la oportunidad de intergrarlo en mi vida.
Yo era una persona normal y de repente me convertí en la nieta de Amon Goeth.
Al obtener la información de manera tan repentina, como caída del cielo, me resultaba casi imposible incorporarla en la idea de quien soy.
Mi abuelo me habría matado pues voy en contra de todos sus principios.
Si pudiera hablar con él, le diría: "Soy diferente. No tenemos nada en común... aparte de la sangre. Pero la sangre no significa nada".
Era tremendamente angustioso saber que Amon Goeth y yo estábamos vinculados genéticamente.
Siento un poco de esa herencia, pero hay una distancia, lo que me diferencia de mi madre, pues ella creció con su madre (mi abuela) y para ella era difícil dejar el pasado atrás.
He intentado no dejar el pasado atrás sino ponerlo en el sitio donde debe estar, lo que significa no ignorarlo pero tampoco dejar que eclipse mi vida.
Yo no soy un reflejo de esta parte de la historia de mi familia pero aún estoy muy conectada a ella. Así que intento buscar una vía de intergrarla en mi vida.
Es una historia muy peculiar y muy inusual y que tiene un significado más profundo, que tiene que ver con esa pregunta universal de cómo lidiar con el peso del pasado en el presente y debería mostrar que es posible lograr la libertad personal de las cadenas del pasado.

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