Los ‘black blocs’ revientan una marcha contra la privatización educativa por el centro de la ciudad
La protesta de los profesores de secundaria de Río de Janeiro por la educación pública y contra los Gobiernos regional y municipal (ambos en manos del PMDB, aliado de la presidenta Dilma Rousseff) la noche del lunes al martes ha sido escenario de nuevas acciones de los black blocs, un grupo de jóvenes radicalizados y declaradamente violentos. La manifestación, convocada por varios sindicatos de profesores y grupos ciudadanos, tenía como objetivo protestar "contra el desvío de fondos hacia la educación privada" por parte tanto del Gobierno de Cabral como del Ayuntamiento de Río de Janeiro y en repulsa de la represión violenta de anteriores manifestaciones. Los maestros llevan más de 60 días en huelga, a pesar de un recurso cautelar que les obliga a volver a las aulas.
La manifestación recorrió la avenida Rio Branco, la arteria que atraviesa el centro de Río de Janeiro y tradicional escenario de protestas. A pesar de que los organizadores habían pedido "un millón [de personas] para la educación", la marcha reunió, según los organizadores, alrededor de 100.000 personas (10.000 según la policía). Tras dos horas de marcha pacífica, la manifestación llegó a la Cinelandia, el final de la avenida Rio Branco, donde los black blocs empezaron a actuar, montando barricadas y destrozando oficinas bancarias y mobiliario urbano. Ante la violencia, los profesores y la mayoría de los estudiantes se retiraron.
Utilizando fuegos artificiales, piedras y cócteles molotov, cerca de 200black blocs intentaron asaltar la sede de la Cámara municipal. Fue ahí cuando intervino la policía, que lanzó bombas de gas lacrimógeno. Los violentos se dispersaron por el centro de la ciudad. El saldo final, cinco oficinas bancarias asaltadas, un autobús incendiado y varios destrozados, así como gran parte del centro de la ciudad lleno de bolsas de basura quemadas.
Ante las demandas de los profesores, que piden un incremento salarial, el alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes, ha recordado que los maestros de la red municipal de enseñanza, gracias a ascensos y trienios, se jubilan "con el mayor salario del país", aunque admitió creer que los profesionales de la enseñanza deben estar mejor remunerados. Este martes debe celebrarse otra reunión entre Gobierno municipal, padres y profesores para desbloquear la situación. El año lectivo en Río de Janeiro termina el 13 de diciembre.
AGENCIAS Río de Janeiro
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