.Tenue luz al final del túnel fiscal en EE.UU

Redacción

BBC Mundo

El presidente demócrata de Estados Unidos, Barack Obama, y legisladores republicanos por primera vez manifestaron optimismo en llegar a un posible acuerdo para elevar el límite de la deuda nacional -que evitaría una cesación de pagos- y levantar el cierre parcial del gobierno.

(Legisladores republicanos, liderados por John Boehner, se reunieron en la Casa Blanca con el presidente Obama.=

Todavía no hay un acuerdo pero, tras una reunión en la Casa Blanca el jueves en la noche, ambas partes afirmaron que hubo un acercamiento con la posibilidad de que la mayoría republicana en la Cámara Baja ofrezca aumentar temporalmente el crédito.

La Casa Blanca se mostró satisfecha de que "cabezas más frías" estaban empezando a prevalecer en la cámara y anunció que tiene la intención de hacer progresos en la negociación con los legisladores.

Varias instituciones y agencias del gobierno están cerradas desde hace once días por la falta de un acuerdo presupuestario y economistas advierten de fuertes repercusiones en los mercados internacionales si EE.UU. entra en "default".

Aunque el público está frustrado con ambos partidos, una reciente encuesta indica que los republicanos y su facción derechista Tea Party son los principales culpables de la parálisis.

Oferta temporal

Después de una reunión de hora y media en la Casa Blanca, el liderazgo republicano de la Cámara de Representantes y el presidente, Barack Obama, declararon que había esperanzas de llegar a algún tipo de acuerdo para evitar una crisis crediticia de la nación.

"Fue una conversación adulta", expresó el legislador republicano Hal Rogers. "Ambas partes dijeron estar negociando de buena fe".

El líder de la mayoría republicana en la Cámara Baja, Eric Cantor, tildó la reunión de "muy útil" y añadió que continuarían el diálogo.

Todavía no hay nada concreto, pero los republicanos ofrecieron extender temporalmente la autoridad del gobierno de continuar prestando dinero después del 17 de octubre, cuando el gobierno entraría en cesación de pagos.

Según un portavoz del presidente de la Cámara Baja, el republicano John Bohner, sería un incremento "limpio" al límite de la deuda, sin legislación adicional añadida. Duraría solamente seis semanas, hasta el 22 de noviembre.

A cambio quieren que se resuelva la parálisis presupuestaria que ha cerrado partes del gobierno. No quedó claro si los republicanos todavía insisten en su intento de cortar los fondos a la recién implementada Acta de Salud Asequible, conocida como "Obamacare", a cambio de acordar un presupuesto.

Sondeo "culpa" a republicanos

La opinión pública está volcándose contra la intransigencia del Tea Party.

En reacción a la oferta, el secretario de prensa de la Casa Blanca, Jay Carney, dijo que el presidente estaba satisfecho con las "cabezas frías" que parecían empezar a prevalecer entre los legisladores.

Sin embargo, añadió. "No pagará ningún tipo de rescate para que los republicanos en la Cámara Baja hagan su trabajo".

No obstante, Obama está dispuesto a continuar progresando en las negociaciones con los legisladores de ambos partidos, según un comunicado.

La Casa Blanca tiene programada una reunión el viernes con senadores republicanos, quienes dijeron que presentarán sus propias opciones para levantar el cierre parcial del gobierno y resolver la crisis de la deuda.
Hay señales de que veteranos republicanos están hartándose de la intransigencia del Tea Party, el ala derechista que domina la opinión del partido en el Congreso.

Aunque líderes, funcionarios y estrategas republicanos de todos los niveles culpan a Obama por el cierre del gobierno, también acusan a los legisladores del Tea Party en la Cámara Baja que insisten en que cualquier acuerdo para reabrir el gobierno esté sujeto al recorte de fondos para la ley de salud.

El más reciente sondeo de opinión indica que 53% de los estadounidenses culpan a los republicanos de la crisis, comparado al 31% que culpa a los demócratas.