"Cuidados y educación están unidos en una misma tarea:

Según Winnicott, “los cuidados (de buena calidad) favorecen la tendencia innata del niño a “habitar” su cuerpo y a tener placer de sus funciones corporales, a aceptar los límites impuestos por la piel, por esa membrana frontera que separa el Yo del No-Yo.
De Los cuidados infantiles satisfactorios, se desprende la identificación de un sentimiento de continuidad de ser, base de la fuerza de Sí. Cada carencia de los cuidados obstruye ese sentimiento de continuidad de ser, y lleva a un debilitamiento del Yo.

Si durante los cuidados el adulto tiene una atención particular a los signos del niño y se ocupa de él tomándolos en consideración, crea desde el principio la posibilidad que el bebé intervenga a su turno en el proceso de los cuidados y en la manera de satisfacer sus necesidades, especialmente con respecto al ritmo de las comidas, a la cantidad y a la temperatura de la comida, al ritmo de los movimientos del vestido, a la cantidad y a la temperatura del agua del baño...
Si el bebé puede contar con la posibilidad de influir en los hechos que le ocurren, esto llega al reforzamiento de su sentimiento de eficacia, o que constituye la base de su integración social activa.

A lo largo de los cuidados una cierta coordinación de la actividad de los dos partenaires, un diálogo, puede existir desde muy pequeño si el bebé no es nunca tratado como un objeto, pero como un ser que siente, observa, registra y comprende o comprenderá si se le permite por la dulzura de los gestos que, más allá de la gentileza, testimonio de la conciencia permanente del hecho que el bebé es sensible a todo lo que le ocurre y no puede ser manipulado en función de lo que es cómodo para el adulto (...) el desarrollo de ese diálogo es facilitado por la repetición cotidiana de los cuidados, repetición de gestos idénticos, acompañados de palabras casi idénticas, en una misma sucesión que permite poco a poco al niño anticipar el gesto y el hecho” (M.Lemay: “Apropósito de la tarea del Instituto Emmi Pikler”, en “Tomar cuidado de un niño pequeño, de la empatía en los cuidados terapéuticos.)

Material tomado desde la Página de Facebook "Espacio de Acompañamiento": UN ESPACIO para encontrar estrategias diferentes para:

NIÑOS CON DIFICULTADES ESPECIALES
SUS FAMILIAS
MAESTROS INTEGRADORES

Misión

Acompañar: sostener, encontrar recursos propios, construir puentes, abrir nuevas miradas, respetar-se, co-construir espacios de diálogo, encuentros, acompañar la constitución de la persona, acompañar el ser ..

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